domingo, 18 de noviembre de 2007

¿La dama decide? China y el ascenso al poder

Buenos días,

En días pasados, durante la ceremonia final del 17 Congreso del Partido Comunista chino (PCCh), fueron presentados ante la opinión pública los nueve líderes más influyentes en China durante los próximos 5 años, o quizá más, teniendo en cuenta que el Presidente Hu Jintao estaría a cargo hasta 2012.

El suceso, sin pena ni gloria registrado por la prensa extranjera, es uno de los acontecimientos más importantes dentro de la política china que tarde o temprano terminará por afectar la política mundial, la economía, e incluso el futuro de cara al estremecedor calentamiento global. Con el líder que continúe la maratónica carrera modernista de Hu Jintao, tendrán que medirse no solo el próximo presidente de los Estados Unidos, sino todos aquellos mandatarios que sean elegidos o reelegidos dentro de los próximos dos años.

El premier chino dejó claro que sus protegidos son sus presuntos sucesores. Los describió como familiares del pueblo chino –aunque la mayoría no los conozca-, jóvenes y modernos, dos de ellos, con 54 y 52 años. Con su presentación asegura que el PCCh no sufrirá sorpresas en el momento de elegir a su próximo líder y evitará la gran confusión que siguió a la muerte de Mao Tsetung, y posteriormente, en menor proporción, a la desaparición de Deng Xiaoping
Dentro de los 9 escogidos, Xi Jinping y Li Keqiang, tendrán que granjearse la simpatía no solo dentro de sus colegas del Partido Comunista sino dentro del cerrado círculo de información de los medios chinos.

Xi Jinping, de 54 años, hijo de un destacado miembro del Partido Comunista, y conocido por sus propuestas liberales, las reformas económicas y su mano dura, será a partir de ahora el Secretario del Partido Comunista chino en Shanghai, un cargo que sin duda lo mantendrá en la escena mediática durante los años que vienen.

Li Keqiang, de 52, abogado, poseedor de una impresionante hoja de vida que lo lleva desde su vida en una comuna hasta el impecable liderazgo de una empobrecida provincia, ingresó al Partido Comunista en 1976 y ha luchado a pulso hasta llegar al rango 7 de la jerarquía dentro del politburó chino. Es conocido por su proyecto económico “Cinco Puntos para una Línea” que conectó la pujante provincia de Dalian con la lejana provincia de Dandong, en la frontera con Corea del Norte.

Hasta aquí todo parecería igual dentro de la predecible política china, de no ser por un factor que puede inclinar la balanza a favor o en contra de cualquiera de los nueve distinguidos: sus mujeres y la imagen que pretendería dar el gobierno chino tanto de las nuevas épocas que vienen como del nuevo estilo político que han implantado los modernistas. La idea de una China próspera en la que sus líderes ya no van solos por el mundo sino en compañía de su esposa, que deberá no solo tener una amplia simpatía entre los chinos, sino estar bien integrada a la política.

La suerte de Xi, el más opcionado, podría depender de su bellísima esposa Peng Liyuan, una reconocida soprano que no deja pasar la oportunidad para asegurar, que a sus bien llevados 45 años, el secreto del éxito está en la familia y que “la familia es un puerto pacífico y la roca para cualquier mujer”.

Peng, con un master en música popular, ha protagonizado escenas en ópera occidental y china, rompió el record de presencia televisiva durante el pasado Especial del Nuevo Año, y como si fuera poco, en su actuación durante la ceremonia que marcaba los 80 años del ejército chino, transmitida por todas las cadenas de televisión, confirmó ser una patriota moderna pero comprometida. Razones no le faltan, Peng ostenta el rango de General de las fuerzas civiles del PLA (People’s Liberation Army) y se desempeña como Embajadora de China ante la UNICEF.

Lo cierto es que la carrera por el poder en Beijing ha comenzado. Mientras unas imágenes de prensa dan cuenta de un Xi relajado y jovial, otras retratan a un Li Keqiang rígido y taciturno. Cualquier cosa puede pasar en los próximos cinco años. Xi y Peng saben de memoria que por más modernos que sean los tiempos se deben respetar las jerarquías y las formas. Sería la primera vez en la historia china en que el rígido PCCh permita que un líder tenga una celebridad como esposa, y que al estilo de las producciones occidentales se conjuguen la fama, la belleza y el poder.

Una cosa será mostrar al exterior la cara de una nueva China y otra muy diferente superar con éxito los retos geopolíticos mundiales, las impresionantes desigualdades sociales y dignificar las condiciones de 318 millones de 1300 millones de chinos que viven en la pobreza.

Saludos,

http://www.china.org.cn/english/MATERIAL/76256.htm, http://knows.jongo.com/res/article/4628

Foto: Peng Yiluan, durante su espectáculo de la conmemoración de los 80 años del PLA como se le conoce al Ejército de China por sus siglas en inglés. (Xinhua)